viernes, 23 de marzo de 2007

ACLARÁNDONOS

Como sabéis, vivo ciertamente, dirían que disipado. Lo cierto es que cada día mas feliz, más sólido, mas seguro, más convencido, más "un ser humano tal y como me depositaron en la tierra", porque cada día tengo más recuerdos de mi niñez, cada día recupero esa mezcla necesaria de niño-adulto, que siempre ha existido, pero, que desde la consciencia es mas divertida. Esto de pensar te vuelve “loco”, pero es divertidísimo. Lo que os escribo en los últimos días no es origen de ninguna lectura, quizá porque de espiritualidad de saldo estoy, como decirlo, hasta los mismísimos.

Me siento libre. Ante la disculpa de que las cosas son como son, se cae ineludiblemente en la muerte en vida, nos hacemos imbéciles. Ser imbécil es una forma bastante práctica y habitual de vivir, por lo visto.

Volviendo a la imbecilidad. Imaginemos que vives en una aldea en Guinea Ecuatorial (a caballo entre Malabo y Luba, cerca de una plantación de cacao), y te contentas con lo que tienes, es fácil que no te hayas percatado de que hay una playa de arenas finas, de aguas cristalinas. Se puede vivir así. De hecho, si no sabes de su existencia, no la echas de menos. Un tipo de "ojos que no ven,... hostia que te metes". También es cierto que aquel indígena, bien pudiera tener unas arenas movedizas cerca de su espacio y, que de haber ido, pudiera haberla palmado.

Lo que ocurre es que el indígena SIEMPRE Y MOVIDO POR UN ESPÍRITU más o menos aventurero, un día descubrió una plantación piñas, fruto que jamás había probado. Ese fruto le permitió alimentarse mejor. Quiero creer que hasta disfrutaba con la dulzura de los jugos de la piña. (A los niños les encanta el dulce, a todos, qué curioso). Nadie duda, también curiosamente, de que el león marino tiene que cazar focas o que la lombriz tiene que ir bajo tierra, lo hacen todo bien. Incluso cuando el lobo va a un rebaño de ovejas y mata más de las que debería para su alimentación, lo que hace es preparar las vacas flacas por si aprieta dentro de una semana ya lo tiene ahí, eso sí, un poco podridito. Pero y nosotros, ¿qué tenemos que hacer?

Por lo tanto el espíritu de búsqueda y conocimiento forma parte de la condición humana.

Al principio, cuando uno es niño, se te va diciendo que es lo que tienes que hacer, que es lo bueno, que es lo malo. Los padres del niño indígena, sus tíos, “el gurú del poblado”, sobre todo éste, porque a éste sus papás le hacen caso, se lo creen. Es como una cadena de mando en la influencias sobre el niño, porque “saben” más que el niño. Y así es, pero si ellos solo han visto esa playa, es posible que no le favorezcan, que no le permitan o que no le induzcan a que esa búsqueda y ese descubrimiento congénito, se desarrolle. En el caso de que sus padres o gurú quisieran exclusivamente lo mejor para este chiquillo, le limitarían si solo hicieran de ese una personita un ser que fuera poco valiente, que limitaran su aptitud de búsqueda natural. Si por el contrario, hubiera en esas personas algo por lo que además de limitarle su búsqueda, le limitaran por otra oscura razón, el resultado sería la incapacidad de descubrir libremente del niño. Cabría la posibilidad de que aún así, el chiquillo se viera empujado a vivir en otro lugar desconocido sin haberlo decidido por la sencilla razón de que hubo una fatal inundación en su poblado, porque su entorno murió, porque fue expulsado por culpa del exceso de niños y no había comida o porque sus padres, le pegaban y alguien le habló de un mundo bonito por ahí al que ir. Comoquiera que no fue a ese lugar en su fase de búsqueda natural, se enfrenta desde ese momento a aspectos que tampoco pretendía, ya va forzado.

Así es la vida del ser humano, demasiado influenciado por un entorno, como para poder discriminar que es lo propio y que es lo condicionado por cualesquiera de las particulares experiencias no buscadas. En ese momento, empiezas a vivir la vida a partir de los condicionantes mínimos o de los máximos, depends on.

Ocurre que ante esos condicionantes hay una serie de niños que por su naturaleza diferencial son un poco mas lanzados que otros, en el sentido real, ósea que se dan más cuenta de lo que pasa a su alrededor, de lo que les pide el cuerpo. En ocasiones es precisamente lo contrario de lo que pudiera parecer: el más avezado lo es durante un tiempo para luego no serlo y viceversa, ya se pierde el control y sería imposible saber que partes de cada persona son propias y cuales son adquiridas, al tratarse de millones de circunstancias las que habrían de tenerse en cuenta. La única opción sería coger a Mowgli y analizarlo. De ahí que la psico-psiquiatría se convierta en la mayoría de las ocasiones más en una mancia que una ciencia.

El ser humano es tan especial, tan particular, tan diferente, que habría que inventar una ciencia específica para cada materia por individuo y somos en este momento censados 6.531.390.346 y subiendo.

El ser humano imbecil es un ser que ante esta situación, la suya, se mete en baraja, sus razones tendrá, porque lo hace así porque no puede hacerlo mejor, aunque tal vez desde el fondo del pozo tal vez se de cuenta de un problema, (VIVEN[1]). Y es que puedes ser imbecil si no influyes en los demás, si te quedas en tu casita y no sales. Es como aquello de que tu libertad termina donde empieza la mía.

Claro, si te enseñan desde pequeño a hacer esto y lo otro, ya no sabes que es lo que harías por ti, dónde esta la conducta correcta, qué es la que te haría plenamente feliz. Por lo tanto, es posible que hagas cosas todos los días desde tu perspectiva inducida mezclada con la propia: yo lo llamaría caos o esquizofrenia.

Bien, entonces, si el ser humano no sabe muy bien quién es con tanta influencia externa, ¿qué se puede esperar de él?

Podemos recrearnos en la libertad que podríamos adquirir por arte de birlibirloque, pero el satori porque sí, de momento no llega. El espacio de tranquilidad, serenidad y felicidad solo ocurre con unos flows interesantes, pero a la vez, libremente elegidos, y esta es la novedad. Por ejemplo, si este chico de la selva tiene una aptitud natural para hacer un flow[2] concreto (y asumible, no digo “navegante espacial”), y que ineludiblemente la va a ayudar a ser feliz, ¿No sería terrible que sus padres, abuelos, etc., la limitaran y acabara haciendo otro flows menos interesantes para ella, o aún peor, ni siquiera la permitieran tener flows? Pero ¿Y como coño soy libre? ¿Cuál sería la forma de ser libre?

O, te vacías completamente de lo que te ha condicionado, o, ¿Cómo sabes en que te tienes que vaciar? De ahí lo cierto del celebre Bruce Lee en su “empty your mind[3]”, eym de aquí en adelante.

Este tema es casi el primer trabajo: Huir del condicionante. Claro que hay cosas claritas en nosotros en particular, pero hay cada uno por ahí, que al mejor estilo Trillo, Federico, “manda huebos”.

Hay un caminito que hay que ir recorriendo, sin duda. La vida se nos pone delante y no podemos saltarla (aunque agachemos la cabeza y miremos para otro lado, la luna sale por la noche). Si te ves demasiado condicionado por el entorno, pocos movimientos puedes hacer, tienes que realizar un vaciado de mente, hay que hacer un eym, de cabeza. Pero corremos el riesgo de no ver nada, de estar equivocados en cosas que desde nuestro razonamiento apriorístico nos parecen claras, sobre todo si no pensamos. ¿Por qué vamos nosotros a tener que hacer nada, si estamos bien? Hombre, si estas bien, ni le muevas. Pero, ojito, el destino es ser Buda, no leerle y hablar de él. El objetivo es el águila que todo lo ve, que decide por donde quiere ir y actúa.

Si por ejemplo una canalización de Kryon[4] que te ha contado alguien por ahí condiciona tu vida, jodidus habemus, porque quién sabe cuántos Kryon tienes en tu vida. O si por ejemplo, el anuncio de Freixenet en navidad hace que bebas el pseu-champán o, la tontuna de turno, jodidus…

Si eres capaz de pensar, si no te han abducido del todo, quizá puedas darte cuenta de alguno de los condicionantes que te dicen lo que “deberías hacer” y por el contrario, no haces.

Para los que tienen el disco duro lleno de virus, pero el PC arranca y, por consiguiente el antivirus Panda puede ser aplicado aún, si aún se pueden quitar los virus de los diferentes programas corruptos, va lo siguiente (si te consideras así, bienvenido al club de los “parcialmente imbéciles” o “pseudoimbéciles”). De hecho, si no fueras un auténtico pseudoimbécil ya no estarías leyendo esto,…

Si no, si ya el arranque está jodido, hay que formatear y, por lo tanto, la experiencia VIVEN será la única posibilidad para poder arreglar el disco duro, aunque quizá Pitita Ridruejo o Paco Porras[5] puedan dar una respuesta que yo no tengo.

¿Cómo se desprograma? ¿Cómo se pasa en antivirus? Todo se hace desde la mente hacía la no-mente y desde ahí, vamos construyendo el razonamiento, así funciona el antivirus. ¿De que tira la mente? De la experiencia (del dolor y del no-dolor o lo que es lo mismo y menos prosaico, de la felicidad y de la no-felicidad). Sabemos que es lo que nos hace pupa, ya tenemos un indicador claro. Este es un virus que puede ser eliminado.

Pero no es tan fácil. No se da a la tecla “scan” y ya. Para ello hay que tener un antivirus actualizado, por estos virus son tipo “spam” de tipo heurístico, y por lo tanto toma diferentes formas. (Espacio no patrocinado por panda-antivirus ®).

Y además, aparecerán otros nuevos. ¿A que virus me refiero? A los que no nos dejan ver con claridad que el PSOE y el PP tienen mucho que contar a los pobres muertos del 11-M sobre lo que pasó, cantidubidubidubi. El documental[6] de Telemadrid que habla del 11M, también es una clara muestra de que estos políticos nos engañan. Sí, por ejemplo, yo conozco a un individuo que me dejo tirado como un perro y se fue a casa cuando me pegue una leche en la moto llevándole a él de paquete perdiendo yo el conocimiento, y que habla[7] de todo al tuntún, tal que fuera la persona versada que no es. Habla sin saber nada de nada porque no ha vivido nada, con el mismo grado de influencia que otras personas con cierto grado vivencial.

Aunque tampoco hay que irse a “temas polémicos” para algunos, si no que miraros simplemente las noticias y cronometremos el minutaje de lo que son noticias reales y lo que son “soma imbecilizante”.

Los hilos del sistema, nos siguen mandando caos a nuestra maltrecha esquizofrenia. Escuchaba el otro día en un por cierto bastante devaluado programa televisivo “cuarto milenio” (es el precio de la popularidad), a un célebre psiquiatra Enrique Rojas Marcos decir tantas tonterías por segundo que no podía seguirlas. Hablaba del pánico y de la felicidad y, os aseguro que si este tipo es de lo más prestigioso que hay es grave, “switch off and lets go”.

En primer lugar, creo, como le pasaba a nuestro niño selvático, las influencias cercanas por el número y calidad de imbéciles en el entorno, no son hechas siempre desde la maldad; fundamentalmente desde la ignorancia, desde la mente muerta, abducida.

Estas personas imbéciles, como autómatas, reproducen modelos. Es el Mundo feliz de Huxley”. Hay que aclarar que no se es en todo de un tipo; cabe cierta claridad en ciertos ámbitos, cabe la posibilidad de ser imbecil en determinados aspectos exclusivamente, aunque parece claro que, si pasas un grado de imbecilidades, ya imbecil eres. Desde luego éstos, lo “black leg” están mas cerca de los epsilón ε que de los alfas ά. Un ejemplo esclarecedor es el que me ocurrió ayer: escuchaba a una persona que está pendiente de la estupidez del sillón-ball-hincha, de los que solo pretende que su equipo gane y no ve más allá, aunque el equipo contrario juegue un partido soberbio. Era feliz porque había perdido su equipo pero también había perdido el equipo clásicamente rival, textualmente: “por lo menos han perdido estos”.

Y que pasa si te vacías mentalmente, ¿te encuentras?, ¿eres libre? Pues tampoco aunque seas ά, hay unos arquitectos del sistema que dominan a los ά. Joder, ¡Qué paranoia!

Hombre, a veces uno duda de todo, porque si la clase política está como está… Hay unos lobby que planean todo el cotarro y que se cargan a quién haga falta si despunta, como le ocurrió a JFK cuando empieza a creer en la democracia. Mario Conde superó el umbral, al paredón. En cambio Emilio Botín, bien man.

Las sectas de poder, los lobby de poder, sean los iluminati o los masones o vete tú a saber, son los que manejan el cotarro.

Y la cadena de mando está clara. Tu bombardeas al ser humano con tu mensaje críptico, (al final los del entorno del niño guineano también están ya bien abducidotes, estaba ya bien armado el asunto), le dejas bien jodidete de vez en cuando, (tal cual ocurre en humor amarillo, cuando se mete un infeliz en una casa llena de puertas, y una vez dentro y cuanto tratas salir, salen tíos de todos los lados que te empujan a salir por la primera puerta que pillas, y te vas al fangal irremediablemente). De vez en cuando también le das soma, angelito él, con lo cual en esas inhalaciones de soma de lo que el sistema quiere, se convierten en el sorbo mas anhelado de “la felicidad”. ¿Qué casualidad que si ves las vidas de la gente, a casi todos les gustan las mismas cosas?

Hay otros métodos de control del ser humano que superan lo imaginable: Televisión, Mind control, control por telefonía de lo que haces y dónde estás, dinero electrónico,…, o te meten en el trullo si te sales del tiesto o… Así es la historia: Mundo feliz, 1984, Matrix, Gattaca, Brazil, El hombre del castillo,…

Y la prueba de todo esto es clara, decidme: ¿Quién coño es moderadamente feliz, sin luchar consigo mismo todos los puñeteros días? Digo realmente. Lo cierto es que con la edad, te entregas, y a los hechos me remito. Miro a la gente de mi edad y me entran ganas de llorar al ver sus vidas. Esto está mal montado, falla algo.

Resulta que hay más depresiones ahora que las cosas van “bien” que antaño. Huele a tufillo otra vez. Resulta que si haces una encuesta en Burundi sobre el grado de felicidad, el ratio es igual que el de cualquier ciudad española.

Aquí va un link clarificador de lo del control del ser humano[8], demasiado quizá. Está claro que mucho de esto es verdad ya, y que cada vez lo será más.

Me pido ser pseudoimbécil. Pero, y tú Dios, ¿Por qué me has abandonado?



[1] Es lo que yo he venido a llamar experiencia VIVEN, la de los jugadores de Rugby que se la pegaron en los Andes. Una experiencia traumática en la que o espabilas o palmas.

[2] Flow, según se desprende de lo que dice Punset en su libro “El alma está en el cerebro”, viene a ser aquella actividad ilusionante que te permite ser razonablemente feliz, sin la que no se puede ser feliz y, que todo el mundo necesita (se incluye costura, sillón-ball, literatura,…)

[3] Extracto de la entrevista realizada a Bruce Lee www.youtube.com/watch?v=a1oecFWrl48

[4] Pagina de la escuela Kryon con múltiples supuestas canalizaciones www.escuelakryon.com

[5] Imbecil pata negra, se ríen de ti todos de él www.youtube.com/watch?v=jNT3aHorXPI

[6] Documental telemadrid 11-M www.youtube.com/watch?v=DAUk9qH5xXs

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Gromenólogo, acojonado con el mundo en el que vivo del que trato de salir por patas